Pollo crujiente al horno.

No creo que haya nadie que yo conozca que no le guste la pechuga empanada. Es una comida universal, tanto para casa, como para los típicos tupers de verano. Sólo tiene una pega, a mi parecer, la ingente cantidad de aceite que hay que usar para freírlas, lo cual hace que sea una comida un poco desplazada en caso de querer cuidarse.

Pues bien, para darse un capricho de vez en cuando, he encontrado esta receta de empanar el pollo sin usar la sartén, haciéndolo al horno. Muy fácil, muy rápido y sorprendentemente muy buena y jugosa.

INGREDIENTES (2p).

- 4 filetes de pechuga. 

- Taza de pan rallado. 

- 1/2 taza de parmesano rallado

- 1 cucharada de ajo en polvo. 

- 4 - 5 hojas de albahaca.

- 1 diente de ajo 

- aceite

- sal

Ensalada de acompañamiento: (opcional, al gusto, lo que vosotras prefirais, ;-) )

- Un tomate. 

- 1 pepino. 

- Un trozo de feta ( o queso al gusto). 

- Hojas de albahaca y perejil fresco picadas. 

- Aceite y sal. 

PREPARACIÓN:

Precalentamos el horno a 180º

Salpimentamos las pechugas, picamos el ajo y lo ponemos en un bol amplio, echamos las pechugas y rociamos con un poco de aceite para que empape. Dejamos reposar unos 15 minutos.

En un plato llano, mezclamos el pan, el ajo, el parmesano y las hojas de albahaca picadas, mezclamos bien. 

Pasamos las pechugas por la mezcla de pan y  las vamos colocando en una placa de horno recubiertas con papel sulfurizado. 

Una vez estén todas las pechugas, echamos el resto de la mezcla de pan por encima para crear una costra. 

Horneamos durante 25-30 minutos o hasta que estén bien doradas. Servimos con la ensalada de acompañamiento. 

 Espero que lo disfruteis!